Industria de alimentos: 5 buenas prácticas para incrementar tu competitividad

Industria de alimentos: 5 buenas prácticas para incrementar tu competitividad

Hoy en día, las nuevas tendencias de consumo en la industria de alimentos se orientan a la demanda de productos que cumplan con estrictas normas de calidad y sanidad.

Son cambios que desarrollan un entorno comercial más exigente, en el que el consumidor no solo se enfoca en el producto final, sino que tiene en cuenta aspectos como la inocuidad alimentaria y la sostenibilidad (FAO, s.f.).

Por esto, hoy más que nunca tu empresa necesita mantenerse competitiva y adaptarse al proceso de reactivación económica, que implica, entre otras cosas, adoptar nuevos protocolos y buenas prácticas en tu cadena de valor.

De esta manera, puedes garantizar productos seguros para el consumo. Además, debes optimizar tus operaciones y disminuir los riesgos en la producción y distribución (Intedya, s.f.).

Estas son 5 buenas prácticas que puedes implementar para favorecer el incremento de tu competitividad.

Industria de alimentos: 5 prácticas de competitividad

1. Seguir los principios de prácticas higiénicas establecidas en El Codex Alimentarius

El Codex Alimentarius o Código de Alimentos son normas, directrices y prácticas adoptadas por la Comisión del Codex Alimentarius (CAC). Se trata de un programa conjunto entre la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Contiene las normas alimentarias establecidas para proteger la salud de tu consumidor (FAO y OMS, s.f.).

El Codex te ayudará a proveer alimentos inocuos a tus consumidores. Gracias a que promueve prácticas confiables en el traslado, distribución y comercio de alimentos.

Por tanto, garantiza la calidad de los mismos y asegura que lleguen en buenas condiciones a las diferentes industrias de alimentos como las cadenas de comida y restaurantes.

Además, también es recomendable que permanezcas atento a las recomendaciones del Ministerio de Salud para mantener una operación inocua y segura para tus consumidores.

2. Definir un Plan de Saneamiento adecuado 

Establecer procedimientos estrictos de saneamiento es indispensable para las buenas prácticas de manufactura en establecimientos como las panaderías tradicionales.

Estos deben ser aplicados en todas las áreas de las actividades productivas, de equipamiento y en las superficies de contacto. Para eso, es importante que incluya protocolos de limpieza y desinfección, además del control de plagas y residuos (Bastidas, 2017).

Otros aspectos importantes que esta industria tiene en cuenta son la buena salud e higiene del personal. Así como, una adecuada indumentaria de trabajo que garantiza la correcta manipulación de alimentos y evita riesgos de contaminación (ONUDI, 2020).

3. Mantener una buena gestión de riesgos 

Asegurar la calidad de tus productos y que cumplan con las especificaciones adecuadas que demanda el mercado requiere una buena gestión de riesgos.

Para esto, es importante identificar los tipos de riesgos que pueden ocurrir en tu cadena alimentaria. Desde riesgos físicos por presencia de material extraño en tus productos, hasta químicos y microbiológicos por patógenos y químicos añadidos (FAO, s.f.).

Es importante mantener el control de los riesgos en tu negocio para ofrecer alimentos seguros y competitivos. Puedes optar por aplicar los principios HACCP (Análisis de Riesgos y Control de Puntos Críticos), adecuados para la industria de alimentos y crear tu propio sistema de autocontrol (OPS, s.f.).

4. Desarrollar nuevas formas de llegar a tu consumidor final

En la actualidad, las ventas por internet se han incrementado considerablemente por el cambio de comportamiento de los consumidores. Las nuevas tecnologías y el auge del internet también llegan a la industria de alimentos.

Por eso, es necesario que implementes nuevas formas de llegar a tu consumidor. Las ventas online, con el cumplimiento de protocolos de bioseguridad, te pueden ayudar a mantenerte competitivo.

Esto se debe a las nuevas tendencias de los consumidores en comprar alimentos por internet (Roca, 2016).

5. Optimizar costos y procesos en tu cadena de valor

Lograr mantenerte en el mercado requiere un control activo de tu cadena de valor. Para eso, la industria de alimentos debe enfocarse en elaborar productos de mayor calidad. Una de las formas para conseguirlo es optimizar tus procesos internos y mejorar la eficiencia de tus operaciones.

De esta manera, puedes reducir costos al adoptar protocolos de prevención y tener un mejor seguimiento de tus procesos. Lo importante es definir las actividades primarias y secundarias, y priorizar aquellas que reportan beneficios a tu negocio (Retos Directivos, 2015).

 

Las buenas prácticas varían de acuerdo al tipo de negocio y proceso. Sin embargo, son principios esenciales que deben acompañar toda la cadena alimentaria para garantizar la calidad de tus productos.