Alfajores: dulcesitos, calentitos… ¡los mejores!

Alfajores: dulcesitos, calentitos… ¡los mejores!

No importa con qué lugar asocies a los alfajores (nuestra vecina Argentina o por su origen español o árabe[1]), lo cierto es que estos pequeños postres llevan siglos deleitando nuestros paladares.

¿Tienes antojos de preparar un bocadillo dulce en casa? ¡Ponte el delantal!

Hoy te mostraremos cómo puedes fácilmente preparar alfajores en casa para tu deleite y el de tus familiares e invitados.

Alfajores que son amores

Alfajores en casa: conquista el paladar de tus invitados

¿Cómo no adorarlos? Son crocantitos, dulcesitos, llenos de diversos sabores y, a veces, glaseados o bañados en irresistible chocolate. Ven, descubre su sabor y prepara la receta tradicional de esta sublime delicia.

Toma nota, lo siguiente es lo que vamos a necesitar para preparar 25 alfajores caseros.

Ingredientes

  • 4 tazas de harina de trigo.
  • 1 huevo (y ten también lista la yema de otro huevo).
  • Unas 6 cucharadas de azúcar blanca, o morena, la que prefieras.
  • 1 taza de azúcar pulverizada/en polvo.
  • Libra y media de margarina Dagusto®.
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • Y 250 gramos de delicioso arequipe.

¡Manos a la masa!

Comienza mezclando la margarina, el azúcar y la esencia de vainilla en un bowl o recipiente hasta que queden bien integrados. Luego agrega los huevos (la yema y el entero).

Revuelve dos minutitos y en ese momento, agrega la harina. Vuelve a mezclar muy bien y revisa que no queden grumos. De ahí a la nevera por unos diez minutitos.

Escucha mientras tanto una canción o tómate un café para calmar la espera. ¡Ya pasaron los 10 minutos!

Saca la mezcla. Espolvorea sobre una superficie limpia un poco de harina y pon encima la masa, estirándola uniformemente y calculando que quede de más o menos medio centímetro de espesor. Ve precalentando tu horno a 350ºC.

Con un molde redondito y pequeño corta la masa y pon los circulitos sobre una bandeja enharinada.

Métela en el horno por 15 minutitos. ¡Listo! Huelen delicioso cuando están recién salidos del horno, ¿verdad?

Ahora, a cada una de las galletitas redonditas, úntale el arequipe a tu gusto, júntalas en pares y luego espolvoréales el azúcar en polvo para que queden como pequeñas moneditas nevadas y crocantes.

Bueno, y si te sientes con ganas de experimentar otros sabores e indulgencias, puedes probar con otras alternativas de relleno diferentes al arequipe como: dulce de mora o guayaba, crema de banano, mantequilla de maní o con mermelada de tu sabor favorito.

¡Tu imaginación es el límite!

Cierra la preparación con broche de oro

Al terminar de armarlos, puedes sumergirlos en exquisito chocolate derretido e incluso espolvorearles nueces picadas, maní, almendras, granitos finos de café tostado o, como la tradición lo indica, coco rayado.

Sea como sea que decidas decorarlos, recuerda luego dejarlos en tu nevera por lo menos una hora antes de servirlos.

 


Y no lo olvides, los alfajores en buena compañía siempre son mejores.


 

 

¡Disfrútalos y date gusto!

REFERENCIAS:

REFERENCIAS.

  • [1] (El Clarín, 2020)

 

BIBLIOGRAFÍA.

    • El Clarín (12 de marzo de 2020). El auténtico ADN árabe del alfajor argentino. Recuperado de www.clarin.com/viva